Los lentes progresivos son ideales para personas que sufren de presbicia combinada con algún otro tipo de defecto visual, como miopía, hipermetropía o astigmatismo, porque corrigen todo con el mismo lente. Por supuesto, también las pueden usar personas que tienen presbicia solamente.
Los lentes progresivos están diseñados para que puedas ver de lejos, de cerca y en distancias intermedias.
¿Cómo es eso posible? El cristal progresivo está desarrollado para:
- Ver bien de lejos por la parte superior del cristal o lente.
- Ver bien a distancias intermedias por la parte media del cristal.
- Ver bien de cerca por la parte inferior de la lente.
Por la propia naturaleza del progresivo, al incluir todas las distancias en la misma lente, en los bordes laterales aparecen unas zonas donde la visión es algo borrosa. En lentes de tecnología más avanzada, se consigue reducir al máximo las aberraciones de esas zonas laterales. Más adelante te explicaremos esto más en profundidad. Puede que te parezca complejo al principio, y hasta puede que pienses: pero, ¿por dónde miro?
Tal como haces para mirar en cualquier tarea de tu rutina diaria, sea arriba para coger algo de un armario alto, sea abajo para ponerte los zapatos. El funcionamiento de las gafas progresivas es el mismo, se trata de hacer coincidir la mirada con el punto correspondiente a la zona que quieres enfocar:
Mira por la parte superior de la lente para ver de lejos (de frente, como hacemos al mirar el horizonte), por la parte inferior para ver de cerca (como hacemos instintivamente cuando queremos leer, que bajamos la mirada). En la zona intermedia entre lejos y cerca encontraremos progresivamente todas las distancias intermedias. Por eso mismo se llaman progresivas.
- Tienes todo en un solo par. No tienes que usar tres lentes: para lejos, para cerca y para distancias intermedias. Además, el óptico le puede dar preferencia a la zona de visión que más necesites.
- Ventaja estética. A diferencia de las bifocales, con los progresivos tienes visión continua entre distintas zonas visuales, sin que por fuera se note nada.
- Sí, ahorras, porque seguro que también has oído hablar de que los lentes progresivos son caras, pero… ¿y comprar tres lentes, una para cada distancia? Las cuentas salen.
- Visión nítida y clara siempre. Con los progresivos ves bien siempre. En cambio, las de cerca nunca las tienes a mano cuando las necesitas, y si las has olvidado en casa y quieres ver el móvil, te va a resultar complicado. Si usas lentes progresivos tienes un problema menos.
- Para casi cualquier graduación. También en distancia intermedia, ideales para trabajar en el ordenador.